(18-08-1977 – 21-06-2020)
IN MEMORIAM
Conservacionistas comunales, de duelo
Por: Milagros Ferreyra Ahuanari
Gerente MF TROPICAL FISH E.I.R.L
Mi pequeño homenaje a Adolfo, mi amigo.
La vida de mi amigo, Adolfo Plaza Ceopa, refleja la de muchas personas de comunidades indígenas, que trabajan, quizá en forma anónima, conservando los recursos naturales y muchas veces olvidados e incomprendidos por las autoridades; pero también refleja sus ansias de superación y buscar un mundo mejor, con un ambiente sano que pueda ser aprovechado sin destruirla. Ese es el principal mensaje de la vida de nuestro amigo, Adolfo, conservar los recursos naturales por 20 años.
Adolfo nació en la comunidad de Padre López situada a orillas del río Puinahua, y siempre vivió en ese lugar rodeado de bosques, el río y una cocha cercana. Como muchas personas del lugar, vivió utilizando los recursos naturales del bosque, del Puinahua y de la cocha “burro”, cercana a su comunidad. De niño pescaba en la cocha “burro” acompañando a su padre y aprendiendo las faenas de la caza y la pesca, y alternando sus estudios y conocimientos básicos. En esos años de niñez y juventud recorre los territorios de su comunidad y adentrándose a la inmensidad del bosque, conoce el Varadero “Mangurmana” que conecta a la naciente del Caño Alfaro, un tributario del Alto Pacaya, que sería su lugar de trabajo conservacionista.
De niño, en su escuela primaria del caserío de Obrero, escuchó por primera vez, hablar de la Reserva Nacional Pacaya Samiria, cuando una comisión visito su comunidad en el año 85 del siglo pasado; como muchos, recién se enteró que su lugar de nacimiento estaba en una “Reserva”. Desde ahí empezó su tarea de cómo vivir en ella sin destruirla. Se hizo un hábil de la pesca y la caza de subsistencia y cuando ya joven, a los 23 años, se unió al grupo de manejo “Los Pirañas” liderado por su tío Tomas Shapiama, en los principios del siglo XXI. Desde el año 2000 participó en la protección y conservación de los recursos naturales en la naciente del caño Alfaro, que conocía a la perfección. Junto con Tomás Shapiama y otros comuneros de Padre López, en esos años ayuda a funcionarios del Estado a repeler a taladores ilegales de maderas valiosas, que acechaban esos lugares, en esos años. Disciplinadamente fue integrante del Grupo Los Pirañas, por espacio de 10 años.
Por necesidad de protección de los recursos naturales y cubrir más territorio que conservar, en el año 2010 crea el Grupo de Manejo “Los Puma Garza” con otros parientes de su comunidad y siempre colaborando con el Puesto de Control Alfaro, de la Reserva Nacional Pacaya Samiria.
En el año 2010, conocí a Adolfo, cuando ellos buscan apoyo para formalizarse a exigencias del Estado. Se acercó a mi empresa MF TROPICALFISH EIRL, para trabajar en forma mutua y colaborativa. Desde ese año, formalizamos nuestra alianza de trabajo mutuo y siempre llena de confianza. Nuestra alianza de trabajo: empresa privada y empresa comunal, se mantiene hasta hoy.
Adolfo, junto a su tío Tomás Shapiama, líder del Grupo Los Pirañas, en al año 2013, formalizan su Primer Plan de Manejo oficial, el Plan de Manejo de la taricaya Podocnemis unifilis en el río Pacaya, oportunidad que les da formalmente el Estado peruano. También estaba promoviendo formalizar el manejo de otros recursos naturales como la arahuana y otra fauna y el paisaje, conservada por ellos.
Una inmensa pena invadió mi ser, al saber de tu fallecimiento el día 21 de junio, a causa de un virus venido de lugares muy lejanos. AMIGO, No quiero decirte adiós, porque no es necesario, sigues aquí más que nunca, estás en la presente memoria de muchos como un ejemplo a seguir por todos, alguien que sobrevivirá al olvido. Aún recuerdo nuestra última conversación que se basó siempre en la confianza de trabajar unidos por muchos años más.
Gracias Adolfo, por haber dedicado casi la mitad de tu vida a conservar los recursos naturales, tratar de mejorar la calidad de vida de tu familia y comunidad. Siempre te recordaré y te recordaremos, amigo.
