Abono natural

El trabajo de la tierra es muy importante para que la agricultura sea familiar, comunal o a escalas mayores para comercialización. Sin embargo, en nuestra región Loreto o en la Amazonía en general, no tenemos esa regla estricta de usarlo en la agricultura. Hay poca experiencia en el tema del abono, aun teniendo a la “gallinaza” (abono) como un aliado económico, ésta también escasea.
Es por ello que resulta alentador que desde la dirección regional de Agricultura del Gore Loreto, se venga trabajando la mejora de la producción desde el abono, así como mediante el uso de motobombas lograr la extracción de agua, para mejorar el sistema de riego. Esta técnica agraria que también falta aplicar porque nos confiamos de la caída de las lluvias.
Se trata de mejorar la capacidad productiva, en calidad y cantidad de los productos hortícolas y ello se debe hacer extensiva a toda la región Loreto. En buena hora que hayan iniciado con 300 horticultores en una extensión de 30 hectáreas, en biohuertos familiares.
Los resultados de estos sembríos llevan a tener productos netamente orgánicos y también al alcance de la canasta familiar, que finalmente es uno de los objetivos del sector agrario regional. En esta oportunidad, la experiencia está en los sectores de Rumococha y Santa Clara. Y por eso decimos que debe extenderse a toda la región a través de las oficinas subregionales del agro que existen en cada provincia.
Y más que todo como una base, persistir en el tema del abono para los sembríos y así lograr mejoramiento de los frutos, de la producción en general. En tanto que el proyecto en sí se llama: Implementación de Sistema de Riego para Mejorar la Producción.
Es importante mencionar que los productos netamente orgánicos son los más solicitados en mercados de consumidores más exigentes, por lo que la experiencia que vienen empezando a ganar, en este caso específico los horticultores, tiene visión de futuro, aunque no es nuevo en el mundo agrario solamente que son insumos que faltan consolidar en nuestros territorios amazónicos.
En nuestros viajes por la región podemos ver que en los huertos familiares o entre los productores comunales, ellos no van más allá del cuidado de la hierba mala en sus sembríos, más no hay un criterio de riego, porque esperan las lluvias y tampoco del abono, por eso es que ellos dicen que “cuando la tierra se cansa” a la segunda o tercera cosecha, ya tienen que cambiar de área de cultivo. Estas acciones para mejorar la producción son un buen paso, pero tiene que ser mucho más amplio.