A LA BÚSQUEDA DE UNA EMPRESA CON JUSTICIA SOCIAL Y AMBIENTAL.

POR:JUAN SOREGUI VARGAS.

Estamos viviendo desde hace décadas la experiencia del cambio dentro del fenómeno del conocimiento y tecnología para encontrar empresas e industrias que sean justas con el ambiente en que vivimos y con ecuanimidad social. Estos acontecimientos del uso del conocimiento científico y la innovación  ya estaban en camino de ocurrir y estaban predichos no en los siglos XVIII y XIX, sino están en el libro de Daniel el profeta  bíblico, miles de años antes de Cristo: Los conocimientos y la ciencia se incrementarán para mejora de la creación de Dios. Hoy, esta frase del profeta nos hace ver con claridad meridiana el incremento de conocimientos científicos y tecnologías que nos hacen abrigar esperanzas y realidades de hacer industrias que puedan prevenir,  resarcir y renovar lo que por la naturaleza de sus actividades cotidianas impacta en menor o mayor cantidad.

Es por eso que ahora en las actividades mineras, petroleras y en las refinerías del mundo se utilizan modernas tecnologías para prevenir, para restaurar ambientes impactados y en conciliadora y estratégica unión se trabaja con los habitantes del entorno en donde estas empresas desarrollan sus actividades. Una de estas empresas que ya va a cumplir 60 años de actividad en nuestra región, ha tratado por todos los medios de ir a la búsqueda de una empresa limpia, y creemos que lo ha conseguido con el concurso de ciencia y tecnología, de personal capacitado, de trabajo mancomunado con los habitantes del entorno del bajo Amazonas.

Su propuesta de trabajo de hacerlo con los nativos de esa zona y de respeto a la naturaleza, ha llevado a construir grandes estanques de agua, espejos de agua limpia en la que se han sembrado aguajes, árboles frutales, crianza de peces como el paiche en uno de ellos y de otras especies ícticas para la seguridad alimenticia de la gente de los alrededores, observándose un paisaje de tanques que hacen juego con la naturaleza verde. Pero no solo ha realizado esta actividad con rostro ambiental y humano, sino que la refinería ha apoyado y continúa apoyando certámenes culturales, como exposiciones de pintura, música de calidad, narraciones a nivel nacional y regional, donde han surgido algunos de nuestros escritores ganadores de premios. Ha apoyado acciones de solidaridad con los más pobres al proporcionar combustible para embarcaciones de salud, para las emergencias de inundaciones, entre otras, que tienen necesidad los pobres de esta región.

¿Quién puede atreverse a decir que esta ciudad que va a la modernidad no tenga este elemento vital como es el combustible que refinan en esta empresa? Nadie, en su sano juicio, podría vivir sin este líquido elemento? 40,000 mil motocarristas, del cual dependen tres integrantes más, es decir 120,000 habitantes que se quedarían sin pan, alumnos practicantes, trabajadores, grifos cerrados, casas ensambladoras de motos cerradas, lanchas sin combustible, oscuridad total, es decir el apocalipsis en general sin este combustible, llamado gasolina y sus derivados.

Por eso, es necesario que esta empresa que ha encontrado el rumbo de la empresa en el fenómeno del cambio en el conocimiento y la tecnología, debe seguir en ese rumbo, y generando mayor innovación para que exista la responsabilidad ambiental y la inclusión social que tanto se pregona ahora. Pero este modelo de empresa que debe ser imitado no solo es en el campo de las extracciones petroleras y sus derivados. También, existen en otros campos de la productividad.

Allí tenemos a la chacra integral Ángelo, de la profesora Jackeline Reátegui, que ha hecho el círculo casi perfecto de la producción de materia prima (gallinas, huevos, peces, taricayas, frutales nativos amazónicos) que son empleadas en comida típica en su restaurante de la carretera Iquitos-Nauta. Otro prototipo de manejo integral de chacras, de diversión sana (deporte, juegos para niños, música clásica, seminarios y otras actividades) es el del Complejo Centenario de los Ex alumnos Agustinos, en la zona de Anita Cabrera. Además de jugar fútbol o futbolito, nadar, puede recorrer las instalaciones con conejos en crianza, nueve piscigranjas donde se crían peces como el sábalo cola roja, gamitana, paco y paiche, y si usted quiere le pide al administrador que le preparen un envuelto en hoja. La Plus Petrol es otro ejemplo de manejo de la industria limpia con actividades productivas y actividades de conservación con participación de numerosos comuneros nativos de la zona de su jurisdicción respetando culturas y tradiciones y apoyando en actividades educativas y de salud. Y, algo que tenemos que destacar es el trabajo de la PERENCO por las cuencas del Arabella, Curaray y el mismo Napo, que están realizando un programa de evaluación de los recursos hidrobiológicos (esperamos que lo hagan bien) en coordinación con el IIAP y con participación de los nativos. Pero, es necesario que a estas actividades tengan acceso las empresas independientes de la burocracia estatal,  lo cual le dará mayor sostenibilidad a los estudios y actividades.

Eso es nuestro punto de vista. Miren, lo que pasó en la granja Ángelo y en el Complejo Centenario de los Agustinos: fueron asesores independientes que hicieron que estén como están, muy bonitos educativos y rentables. En los cuatro casos, modelos de ambientalistas de verdad, no los de ciudad, han utilizado tecnologías producidas por propia experiencia y de institutos de investigación como el programa AQUAREC del IIAP y la sapiencia de sus trabajadores y de sus especialistas en varias cosas culturales.

De esta manera se combina perfectamente las actividades empresariales, como en el caso del petróleo y gasolina con la conservación del ambiente y la generación de alimentación y trabajo y lo mismo con las otras actividades.