LA PAZ EXCLUYE LA IMPUGNACIÓN ACRE, LOS ENFRENTAMIENTOS FÍSICOS Y LA GUERRA
Por: Héctor Barriga Reátegui
La paz, en primer lugar es orden, la paz no es desorden, la paz es orden y el orden responde a la ambición humana de vivir con entendimiento, con armonía, con seguridad, y con una proyección para que el individuo pueda encontrar el éxito y la felicidad. Para esto se da la ley y todos los países tienen leyes que tratan de establecer el orden, la paz y la armonía.
¿Qué es orden? Orden es el desenvolvimiento de las actividades públicas y privadas, dentro del marco de la ley. Salir de la ley, desbordar la ley, marginar la ley, acarrea el desorden.
Pero antes de la ley propuesta por los órganos pertinentes, para alcanzar la armonía y la paz, la humanidad vivió bajo el régimen de un código que jamás será derogado.
EL CÓDIGO QUE JAMÁS SERA DEROGADO
¿Cuál es el código que jamás será derogado? Las normas hechas por el hombre responden a determinadas situaciones sociales y superadas estas situaciones, las motivaciones humanas son otras que requieren para su regulación, nuevas normativas; sin embargo, una sola vez se dio un código que para el autor de esta nota, jamás será derogado.
El código de Justiniano, el tiempo lo marginó, nadie lo usa; lo analizan los investigadores de la ciencia jurídica, quedó en desuso; la ley del talión o sea el ojo por ojo, diente por diente, el tiempo también lo arrinconó en el olvido y solamente apetitos de venganza pueden aparecer en algunos estamentos sociales, pero no es una norma que se acepta, porque nadie puede hacerse justicia por su mano.
El código de Hamurabi también quedó en el olvido; pero el código que jamás será derogado, pero que tenemos que atender sus mandatos, este código a extraído sus normas de lo más íntimo de la naturaleza humana, responden a la ansia de vivir en armonía y en entendimiento que tiene todo ser humano y basta analizar algunas de sus normas para reparar que las mismas, fueron puestas en la íntima naturaleza humana como algo divino y superior.
La primera norma de este código dice: Amarás a Dios por encima de todas las cosas y esto tiene su razón de ser; los misterios de la vida, del mundo, del hombre y de Dios, son misterios indescifrables y sólo cuando estemos en capacidad científica de revelar estos misterios, entonces ahí tal vez se explique mejor aquello que ahora tiene vigencia: Amar a Dios sobre todas las cosas.
Honrar padre y madre; esa norma se explica por sí sola, nadie, puede atentar y deshonrar al padre y a la madre porque gracias a ellos las generaciones humanas no han desaparecido y seguirán hasta el fin de los tiempos, si el tiempo tendría alguna vez un fin.
Pero la norma que vale la pena resaltar ahora, en que ha ocurrido una tragedia en los Estados Unidos, tragedia que lo sienten las personas, hombres y mujeres en todas las latitudes, como una tragedia que ha ocurrido en nuestro vecindario, en nuestra comunidad, es el alevoso ataque que han sufrido en Tucson Arizona la señora Gabrielle Giffords, además se asesinaron a 6 personas e hirieron a 14 incluyendo a la mencionada congresista americana, parlamentaria, madre y esposa de un astronauta.
Nadie tiene derecho de atentar o lesionar a las personas, porque nuestra condición humana no nos mueve a ello, y lo que ha ocurrido tiene que ser consecuencia de un alma malvada, de un sujeto perverso, de un desquiciado y anormal que ha perdido todo sentido de humanidad.
Nuestra propuesta es NO MATARÁS, no matarás nunca a tus semejantes y esto nos obliga a buscar la paz, encontrar la paz y la armonía, vivir en paz. Los seres superiores como la persona humana que ha recibido el cerebro como una generosidad divina, debe tener presente siempre que así como todos tenemos el instinto de conservación de la vida, debe considerar también que está gobernado por sus instintos, por su educación, por sus conocimientos, a no atentar contra sus semejantes.





