– Fue trasladado al HAI
Se preparaba para un día más de trabajo honesto y el destino le jugó una mala pasada. El día de ayer el señor Heráclito Sías, de 46 años, se disponía a alistar su puesto de emoliente para dar inicio a su jornada muy temprano por la mañana, como lo viene haciendo desde hace dos años. De pronto, un desperfecto en la tapa de su balón de gas ocasionó un fuerte estallido que dejó al señor Sías con severas quemaduras en el rostro y los brazos.
«Yo había revisado todo mi equipo de trabajo hace poco y todo estaba bien. Realmente no sé qué pasó, tal vez el gas estuvo bombeando mal y eso ocasionó que vuele le tapa. De pronto yo quedé cubierto de petróleo y la candela corrió es cuestión de segundos. No pasó mucho tiempo y estaba cubierto en llamas», recordó el accidentado vendedor. Mientras se echaba una solución para calmar el dolor, el señor Sías contó que en sus dos años trabajando como vendedor de emoliente nada similar le había sucedido: «Siempre tengo el máximo cuidado, por eso me sorprende que esto haya podido pasar. Las heridas me duelen, pero agradezco que no haya pasado a peores cosas».
El señor Heráclito fue llevado de inmediato al Hospital Apoyo Iquitos donde fue atendido rápidamente por el personal de Emergencias: «Ni bien llegué me pusieron una inyección para el dolor, ahora estoy esperando que lleguen mis familiares porque recién me comuniqué con ellos. Espero recuperarme pronto para volver a trabajar», añadió. (C. Chunga)