Vientos fuertes arrasaron con casas y árboles

– En el AH “Violeta Correa” sector de  La Participación Foto casa y arbol 2

Los vientos fuertes  de aproximadamente 76 km/h que se registraron la madrugada de ayer en la ciudad de Iquitos, departamento de Loreto, dejó como saldo techos, viviendas y arboles caídos. El primer caso se registró en el sector de Bagazán, distrito de Belén, donde el techo entero del segundo piso de un inmueble se vino abajo por la fuerza de los vientos huracanados, “felizmente no estuvimos en el segundo piso, sino moríamos aplastados, pensamos que el viento iba a ser despacio, pero cuando escuchamos que el techo cayó nos asustamos mucho, y salimos corriendo de la casa pensando qué había pasado con el techo aligerado por el brutal impacto.
Vivo muchos años en Iquitos y la verdad nunca antes había pasado por esto y jamás vi algo similar lo que pasó ayer, seguro es la tempestad de Santa Rosa que siempre se da en este mes de agosto, pero adelantado”, sostuvo la propietaria del inmueble Emma Cotrina . Otra de las víctimas de este embate de la naturaleza fue la señora Joyce Gómez, quien salvó de morir junto a sus menores hijos aplastada por el techo de su vivienda que se ubica en la calle “Ampliación Nueva Esperanza”, ubicado en el distrito de Iquitos. A decir de la agraviada, cuando escuchó el viento y la lluvia que caía, levantó a sus hijos de la cama y cogió todo lo que tenía a su alcance, salió corriendo de su vivienda y fue a tocar la puerta de la casa de su vecina en donde le dieron auspicio a ella y a sus hijos, “con este viento que nos tocó ayer en la madrugada mi casa se vino abajo por completo, mira dónde estamos viviendo, no tengo cómo levantar mi casita, yo vendo pan y eso no me alcanza ni para el clavo, soy madre soltera y tengo que mantener a mis tres menores hijos, la ultimita tiene 11 meses, por favor necesito apoyo de las autoridades para reconstruir mi casita”, precisó. Sin lugar a dudas muchas calles de la ciudad de Iquitos se vieron afectadas por este inesperado viento fuerte que nos tocó soportar; como claro ejemplo tenemos también la caída de varios árboles, en especial uno que se descuajó en la cuadra 12 de la calle Moore que por varios minutos impidió el libre tránsito de vehículos mayores y menores, y arrasando con cables de circuito cerrado de varias empresas, “el árbol no era tan viejo, pero la fuerza del viento hizo que lo arrancara de raíz, gracias a Dios no pasaba nadie por el lugar, sino los mataba”,  dijo un vecino de la zona. (C. Ampuero)