Todos los días roban cables eléctricos en el centro de la ciudad y perjudican a cientos de clientes de Electro Oriente

-Vecinos exigen mayor apoyo policial

En forma alarmante en los últimos meses se ha incrementado el robo de cables eléctricos por las principales calles del centro de la ciudad, con el consiguiente perjuicio que esto trae a los vecinos que sorpresivamente se quedan sin el servicio eléctrico por culpa de los «amigos de lo ajeno», quienes sin ninguna contemplación han ido avanzando en estos actos temerarios con el que ponen en riesgo su vida y la de los demás.

Solo en esta semana han ocurrido los siguientes robos de cable: el pasado martes 19 de febrero de 2013, por la madrugada «desaparecieron» 75 metros de cable en la calle Távara West cuadra 6, hecho efectuado por sujetos no identificados, lo que produjo la interrupción parcial del suministro eléctrico en baja tensión en la subestación de distribución del sector. Igualmente el día miércoles 20 se presentaron dos casos más, uno de ellos en la Av. Guardia Civil, 30 metros de cable y en calle Abtao, 40 metros. Por último el día de ayer jueves por la madrugada entre las calles Gálvez con Castilla hurtaron 27 metros de cable al igual que entre las calles Bolognesi con 9 de Diciembre, 40 metros de cable.

Esta situación preocupa sobremanera a los funcionarios y trabajadores de la empresa eléctrica, dado que los reiterados actos delincuenciales deterioran la infraestructura eléctrica y afectan la calidad del servicio que reciben los usuarios por los cortes intempestivos del servicio eléctrico; motivo por el cual solicitan mayor presencia y control policial que lleve a la captura de estas personas que han variados sus lugares de operación, anteriormente se robaban los cables por lugares alejados de la ciudad, y ahora están en el centro y todos los días.

Electro Oriente hace un llamado a los clientes y autoridades policiales para estar atentas ante la presencia sospechosa de sujetos que vestidos de uniforme similar al personal técnico, roban los cables de cobre de las redes eléctricas para luego venderlos a los locales de compra de chatarra.