Piden identificarse

En muchos casos los profesores deben sentir que el peso de educar solo desde los conocimientos pedagógicos que ellos recibieron, es una carga demasiado pesada. Entrar a un aula, mirar a sus alumnos con rostros a través de los cuales se leen sus grandes necesidades no cubiertas, también debe ser frustrante.
Esto debe suceder principalmente en las zonas alejadas de las urbes, o en los mismos sectores periurbanos de una ciudad. Así no quisiéramos estar en el lugar de un docente que se siente solo contra el mundo, a pesar que la Constitución Política del Perú habla de una educación gratuita en condiciones más que básicas para todos.
De que se vienen dando mejoras, es cierto, pero todavía se siente ese tufillo de hacer las cosas a medias. Recordemos que en la década del 80 con el gobierno del presidente Belaunde se vendió la idea de que tener infraestructura educativa garantizaba una buena educación, y con el programa populista «el pueblo lo hizo» se construyeron colegios. Se limitó a la parte constructiva.
Recordamos que como padres de familia luego de la alegría de la inauguración de su escuela, empezaba el vía crucis para conseguir la implementación de los mismos con carpetas, sillas, mesas, armarios, y una serie de materiales del que carecían. Durante el gobierno del Apra se trabajó de algún modo en las implementaciones. Fujimori la maleó porque si bien apuntó a implementar, al igual que los otros gobernantes el incremento del presupuesto de la educación quedó en «cuento chino».
Las siguientes campañas electorales de todos los niveles de gobierno seguían hablando y prometiendo por la educación. Aumento del presupuesto que implicaría también incrementar las remuneraciones de los profesores, lo que en buena medida ha mejorado desde la nueva ley de la Carrera Magisterial. Toledo no hizo un mal trabajo en ese tema, pero tampoco el aumento del presupuesto a la educación fue importante. Humala que reforzó los programas sociales y enlazó el compromiso de los padres de mandar a sus hijos al colegio, pero el aumento sustancial al presupuesto educativo, siguió en pendiente.
Es curioso que muchos políticos se refieran al modelo educativo japonés, al cubano que también funciona bien y ha sido reconocido por la Unesco, al modelo educativo de tantos países que han logrado desarrollarse justamente por invertir en la educación para todos y de calidad.
El presidente de la república Kuczynski hace poco se refirió a una revolución de la educación en el Perú y hasta la fecha seguimos esperando saber en qué consiste, mientras una humilde docente de un colegio rural ha pedido «que las autoridades se identifiquen con la educación de la niñez». Y esto no solo a inicios del año escolar, sino durante todo el período.