«Ojalá y las autoridades cumplan con lo que vienen ofreciendo»

– Mencionó Vicario de Iquitos Miguel Olaortua
– Dijo respecto al ofrecimiento de restaurar la capilla de la «Señora de la Consolación» que hace poco se quemó.
– También expresó sentirse apenado porque acá no se celebra tanto la «Bajada de los Reyes» como en su tierra. DSC00024

A lo ya expresado por el presidente regional en cuanto a que apoyarán para la reconstrucción de la capilla agustina ubicada en la calle Nauta con el malecón que hace poco se incendió debido a un cortocircuito, la alcaldesa de Maynas también ha ofrecido cooperar para que ello se haga realidad.
Luego de las promesas hechas, el Obispo Miguel Olaortua, considero que lo dicho por las autoridades era una buena noticia. «Es una buena noticia con tal que se cumpla y se pongan de acuerdo los organismos para recuperar el edificio histórico donde está la Orden de San Agustín. La municipalidad y el gobierno regional podrán coordinar para ver cuál es la manera correcta de actuar para evitar que se siga desmoronado y así restaurarla totalmente», mencionó el Obispo.
¿Qué saben oficialmente, porque para algunos el incendio habría sido provocado?
-Bueno no, lo que yo sé es que el incendio se inició por un cortocircuito en uno de los stands de artesanía y que de ahí pegó al auditorio y a la Capilla. La que más ha sufrido es la capilla sin duda.
De otro lado, este martes se recuerda la «Bajada de Reyes», qué podría acotar a la importante fecha…
-Me da mucha pena porque yo vengo de una cultura donde sí se celebra mucho la «Bajada de Reyes» el 6 de enero y acá no. En la fecha hay mucha ilusión infantil y también para los mayores que tienen la oportunidad de hacer felices a los pequeños. Ojalá y se recupere un poco esta fiesta que se celebra en muchas partes del mundo.
Se recuerda la ofrenda, los regalos que los Reyes Magos Melchor, Gaspar y Baltazar, le llevaron al niño Jesús. Siguieron la estrella y encontraron al niño Jesús evitando un poco la persecución de Herodes. Ofrecieron oro, incienso y mirra, simbolizando la realeza del hijo de Dios, la naturaleza humana y su fragilidad, el culto que tributamos y la mirra que antecede a lo que iba a morir crucificado, para su sepultura», contó.