- Familiares culpan a Consorcio responsable de la obra y piden justicia
- Lamentable hecho ocurrió en el distrito de San Juan Bautista
- “La empresa no tapó los buzones de la obra que había terminado”, denuncia la mamá de la menor
- “Mis dos hijos están con secuelas debido a la desgracia ocurrida”
El lunes 02 de mayo, alrededor de las 7 de la noche, ocurrió una desgracia en la calle Jesús de Nazareth, en el distrito de San Juan Bautista. La niña Lizeth Canayo Céspedes de 5 años de edad, cayó a un buzón sin tapa en una obra recién finalizada en la mencionada vía.
Las aguas servidas se iban a tragar a la menor, si no fuera por su hermano de 17 años de edad que sin importarle lo profundo del buzón (alrededor de 7 metros) se lanzó a buscarla. Cuando la esperanza se perdía, logró rescatarla desmayada y gracias a Dios reaccionó.
Los familiares de los hermanos reclaman justicia porque consideran que el Consorcio Joaquín Abenzur, responsable de la obra, tiene la culpa porque no tapó ningún buzón a pesar que ya había terminado su trabajo hace días.
“Mi hijita me dice que quiere cenar, le mando con mi otra hija que es más grande para que compre en la esquina su arroz chaufa. A los cinco minutos vienen todos los vecinos corriendo a decirme que se había caído al buzón que estaba sin tapa al igual que todos los buzones. Yo corrí, entre en shock y no pude ver más.
Mi hijo me contó que fue él quien se botó sin importarle nada, la gente le decía que no lo haga porque aparentemente mi hijita ya estaba sin vida debido a la profundidad de 7 metros (tenía 4 metros de agua sucia) y nunca topaba el piso.
Mi hijo no le hallaba a su hermana, comenzó a buzar por todos los tubos del desagüe y no le encontraba, en un momento su cabello rozó con su codo y le halla bocabajo, le levantó y no reaccionaba, un chico le ayudó a sacarle junto a los vecinos con escaleras que juntaron en ese instante. Ahí mi hijita reaccionó.
Mi hijo también cuando salió entró en crisis nerviosa, estaba desesperado. Mi esposo le llevó a mi hijita al hospital, luego vinieron dos responsables de la obra y dijeron que van a correr con todos los gastos. Ni bien pasó esa desgracia los de la empresa taparon los buzones como para decir que acá no había pasado nada”, cuenta Gisela Céspedes Isla (38), madre de los menores.
Incluso, los representantes del Consorcio quisieron minimizar la situación ofreciéndoles dinero a los agraviados para que el caso quede cerrado.
“Me ofrecieron mil soles para que todo quede ahí. Yo no le acepté porque esa cantidad no me costará el tratamiento psicológico de mis dos hijos. El mayor salió asustado, desesperado porque prácticamente recuperó sin vida a su hermana.
Mi hijita está mal de su estómago, seguro que es producto de haber tomado agua cochina desde el momento que se cayó al buzón, incluso ambos salieron llenos de todo lo peor que pueden imaginar.
Incluso los de la empresa nos volvieron a decir el último miércoles que iban a volver para conversar, pero ya han pasado días y no vienen. Parece que están dejando pasar el tiempo para que esto quede en nada, en el olvido. Yo pido que se haga justicia, mis hijos tienen que ser tratados, hacerse sus análisis y el Consorcio tiene que hacerse responsable. No me dan ninguna solución”, aseveró la señora Céspedes.
El Consorcio Joaquín Abenzur con RUC: 20600752538, con dirección Jr. Inmaculada Nº 154 – Callería, Coronel Portillo, Ucayali (ciudad de Pucallpa), según información de la Sunat, se inscribió el 22 de octubre del 2015, iniciando sus actividades el 01 de noviembre de ese año; es decir, pocos días antes que gane la construcción de la obra en la calle Jesús de Nazareth y otras vías aledañas en el distrito de San Juan Bautista. Como representante legal figura Martín Alonso Camus Dávila, que también es, por ejemplo, quien firma las boletas de pago de los obreros. (GL)
