Mística y mujer

Coincide que sea hoy un día 13, y que muchos peregrinos vayan hasta Nauta para orar y elevar sus plegarias a la Virgen Rosa Mística, conocida también como la Virgen del Sol y del Agua; mientras unos peregrinen hasta su altar ubicada en el centro de capacitación campesina – Cencca, a orillas del Río Marañón, otras gentes marcharán por las calles de Iquitos para levantar su voz contra las diversas formas de violencia que afectan física y psicológicamente a las mujeres.
En el tema religioso cristiano Jesús siempre tuvo en cuenta la presencia femenina y está presente en varios momentos importantes de su vida como en las parábolas, en la resurrección, cuando fue crucificado y también cuando resucitó. Entonces desde ya estaba señalado que la equidad era también un mensaje bíblico, puesto que en ésa época las mujeres eran víctimas al ser apedreadas, que era una de las formas de violencia.
Han pasado más de dos mil años y se dieron muchos eventos a lo largo de la historia en general, y no se ha podido conseguir esa vida armónica en el marco de los roles que desempeñan hombres y mujeres, pero son las del sexo femenino las que se siguen llevando la peor parte, porque hombres maltratados y violentados también existen, por parte de mujeres agresoras.
El problema mayor radica en cuando a la administración de justicia y que frente a pruebas contundentes de acciones violentas, existe una especie de sanción permeable, lo que podría configurarse en una manera de ser permisibles frente a hechos que lesionan la vida atropellando los derechos de las mujeres. Estos tienen que ser bien aplicado, es por lo menos la exigencia, en tanto y en cuanto se logre que disminuyan los casos.
Las movilizaciones callejeras que se realizará en muchos lugares del país, marcarán un antes y un después, en la historia de la postura de las mujeres en el Perú, porque alrededor de este tema latente se han unido muchas y diversas organizaciones, hasta ha motivado que personalidades reconocidas no duden en salir a las calles, e incluso que el presidente del Poder Judicial disponga una respuesta en aras de la atención de procesos pendientes, con la celeridad que los justiciables demandan.