Menor vive con bacteria en garganta.

  • Niño de 10 años fue diagnosticado que tiene alojada en la garganta una bacteria desde los dos años.

Indignante. Denuncia presunta negligencia a médicos del hospital “César Garayar García” (HAI);  una humilde mujer indica cómo muchas veces llevó a su niño de emergencia por problemas en las amígdalas y fue una pediatra quien habría  diagnosticado que el menor tenía una bacteria alojada en la garganta y debe ser operado de urgencia.

Raquel Braisat Ramos, madre del menor de las iniciales M.M.B (10), recibió como un baldazo de agua fría la noticia que existe una bacteria aún no identificada en la garganta de su pequeño, causando así su angustia y preocupación.

Braisat contó que el menor nació prematuro a los seis meses y durante el alumbramiento tuvo que ser alimentado por sondas, causando así quizá el contagió con un cuerpo extraño. Recién a los dos años la progenitora del menor evidencia síntomas en su hijo, como mucha fiebre, dolor intenso de amígdalas y a estas alturas un inminente cuadro de desnutrición, producto que no puede ingerir alimentos, solo comidas o bebidas liquidas.

Además dijo que desde los dos años ya presentaba los síntomas mencionadas líneas arriba y las veces que lo llevaba al hospital solo le dieron paracetamol; “una pediatra de apellido Julca me dijo ayer que soy de una familia pudiente y debo operar a mi hijo de inmediato, porque las amígdalas están muy mal. En ese momento lloré y me preguntó por qué han esperado tanto tiempo para que me digan esto, acaso no existe una  historia de pacientes, me encuentro desesperada”, dijo entre lágrimas.

En coordinación con los funcionarios de la Dirección Regional de Salud (DIRESA) se pudo ayudar a la madre que exigía ser escuchada ante el delicado estado de salud, Genaro Alvarado, jefe de imagen dijo ayudarían a la mamá en toda la documentación para que el menor sea trasladado hasta la ciudad de lima y posteriormente ser operado; asimismo, indicó que  investigarán a los presuntos médicos negligentes que no diagnosticaron a tiempo el terrible mal del niño.

(C. Ampuero)