MASHBO: Ser mitológico mitad murciélago y mitad boa

-Un ser legendario humanoide que dejó su hogar debido a la destrucción de su habita natural «la selva

En nuestra edición de carnaval, «La región» dio a conocer el ganador del mejor traje por carnaval que desarrolló la Municipalidad de Punchana, siendo elegido el personaje de «Mashbo», un ser legendario de forma humanoide mitad boa y mitad murciélago que dejó su hogar debido a la destrucción de su hábitat natural «la selva».

Este personaje es del artista multifacético Fritz Ahuanari, quien también es el creador del Runachaqui, también ganador del mejor personaje en carnaval del 2012. Dos años seguido llevándose este premio, cuyo concurso viene teniendo más adeptos, pues existen más ciudadanos que vuelcan toda su imaginación en la creación de personajes amazónicos, siempre bajo el esquema mitológico

Fritz, nos brindó la historia de este personaje… «Hace algunos años atrás, se escuchó historias en algunas comunidades y pueblos de la Amazonía,  de un ser con alas que vuela en las noches sobre los techos de las casas, causando perjuicios a las viviendas, este ser venía sembrando el terror en estas comunidades, los más ancianos creen que se trata de Mashbo, un ser legendario de forma humanoide mitad boa y mitad murciélago, que dejo su hogar debido a la destrucción de su hábitat natural «la selva», ha emigrado a la ciudad de Iquitos donde actualmente reside en las casas antiguas y abandonadas que datan de la época del caucho, en las noches es testigo de todo lo que pasa en esta ciudad selvática.

A pesar de su apariencia monstruosa es un ser muy bondadoso, amable y amigable, solo que está muy disgustado con algunos personas que ensucian la ciudad de Iquitos, tirando basura en las calles, no respetando las señales de tránsito y haciendo cosas malas, él se da cuenta de todo esto, mirando desde los techos de las casas.

«Mashbo de padre murciélago y su madre fue una hermosa boa, por más malo que aparenta, es un ser amable y de buen corazón, de muy joven tuvo que huir de su selva, debido a que estaba siendo destruida por algunos hombres malvados. Ahora estoy en Iquitos, tratando de sobrevivir como todos nosotros, en esta gran ciudad…»

Cuando llega la fiesta tradicional del carnaval en la Amazonía, Mashbo disfruta mucho de observar desde los techos de las casas, la alegría de las personas, es testigo de la diversión popular, las comparsas, los carros alegóricos, las danzas, los grupos de música típica que se juntan para parar la húmisha y divertirse con los amigos y familiares…

En medio de toda la diversión de música folclórica y pandilla, Mashbo sale de las casonas para danzar con las personas al ritmo del contagiante sonido de la cumbia amazónica, y también disfrutar con la mezcla de las más extravagantes músicas de moda.

Cuando los primeros rayos del sol, comienzan a bañar a Iquitos, Mashbo tiene que regresar a las casas antiguas, donde vive, para descansar y esperar el momento del próximo carnaval para volver a salir de su escondite. Si lo buscas puede que lo encuentres… en el próximo carnaval».

Una historia junto a un personaje que ya viene ganando mayores admiradores, pues no dude que los verá, pues estamos seguros que en cuanta presentación cultural haya, el «Mashbo» y el «Runachaqui», estarán. (MIPR)