LA DESORIENTACION SEXUAL EN EL PERU

Por: FERNANDO MELENDEZ ZUMAETA

Email: loretoesmibandera@hotmail.com

 

El Estado peruano a través del Ministerio de Educación, publicó la Resolución Ministerial N° 281-2016 – MINEDU, mediante la cual aprueba el Currículo Nacional de la Educación Básica Regular para el año 2017. Jaime Saavedra, con en esta norma incorpora soterradamente el enfoque de género en la educación peruana, parafraseando y confundiendo a millones de peruanos con la equidad o igualdad de género. Señala por ejemplo: ENFOQUE IGUALDAD DE GÉNERO. Todas las personas, independientemente de su identidad de género, tienen el mismo potencial para aprender y desarrollarse plenamente. Fijémonos en lo que precisa de manera disimulada: “En una situación de igualdad real, los derechos, deberes y oportunidades de las personas no dependen de su identidad de género…Si bien aquello que consideramos “femenino” o “masculino” se basa en una diferencia biológica-sexual, estas son nociones que vamos construyendo día a día, en nuestras interacciones” ¡Qué ignominia!

 ¿Qué nos trasmite Jaime Saavedra? Que los varones y las mujeres no nacen como tal, sino que se van construyendo día a día en sus interacciones cotidianas ¡Qué Infamia! ¡Esta afirmación  es inaceptable!. ¿Qué busca el Estado peruano al implementar la Ideología de Género, confundiéndolo como Igualdad o Equidad de Género? Al respecto el Plan Nacional de Igualdad de Género, aprobado por Decreto Supremo Nº 004-2012-MIMP. Define y precisa claramente lo que significa Igualdad y Equidad, que dista mucho de lo que afirma Saavedra, veamos.

 Equidad de género es la justicia en el tratamiento de varones y mujeres de acuerdo a sus respectivas necesidades. Implica el tratamiento diferencial para corregir desigualdades de origen a través de medidas no necesariamente iguales, pero conducentes a la igualdad en términos de derechos, obligaciones, beneficios y oportunidades. La equidad de género supone el reconocimiento de las diferencias, y la garantía de la igualdad en el ejercicio de los derechos.

Igualdad de género es la igual valoración de los diferentes comportamientos, aspiraciones y necesidades de los hombres y las mujeres. En una situación de igualdad real, los derechos, responsabilidades y oportunidades de los varones y mujeres no dependen de su naturaleza biológica y por lo tanto tienen las mismas condiciones y posibilidades para ejercer sus derechos y ampliar sus capacidades y oportunidades de desarrollo personal, contribuyendo al desarrollo social y beneficiándose de sus resultados.

 

¿Qué es la Ideología de Género o Enfoque de Género? leamos y comprendamos.

 «El género es una construcción cultural; por consiguiente, no es ni resultado causal del sexo ni tan aparentemente fijo como el sexo. El género mismo viene a ser un artificio libre de ataduras; en consecuencia hombre y masculino podrían significar tanto un cuerpo femenino como uno masculino; mujer y femenino, tanto un cuerpo masculino como uno femenino».
Esta perspectiva, para sorpresa de muchos, se refiere al término género como «roles socialmente construidos».

 La IV Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre la Mujer, realizada en setiembre de 1995 en Pekín, fue el escenario elegido por los promotores de la nueva perspectiva de género para lanzar una fuerte campaña de persuasión y difusión. Allí definieron que «El género se refiere a las relaciones entre mujeres y hombres basadas en roles definidos socialmente que se asignan a uno u otro sexo». Esta definición creó confusión entre los delegados a la cumbre, quienes solicitaron una mayor explicitación del término ya que se presentía que podría encubrir una agenda inaceptable que incluyera la tolerancia de orientaciones e identidades homosexuales, entre otras cosas. Fue entonces que Bella Abzug, ex-diputada del Congreso de los Estados Unidos, explicó el término «género»: «El sentido del término género ha evolucionado, diferenciándose de la palabra sexo para expresar la realidad de que la situación y los roles de la mujer y del hombre son construcciones sociales sujetas a cambio».

«No existe un hombre natural o una mujer natural, que no hay conjunción de características o de una conducta exclusiva de un solo sexo, ni siquiera en la vida psíquica». Así, «la inexistencia de una esencia femenina o masculina nos permite rechazar la supuesta superioridad de uno u otro sexo, y cuestionar en lo posible si existe una forma natural de sexualidad humana». Dijo.

La teoría del «feminismo de género» se basa en una interpretación neo-marxista que comienza con la afirmación de Marx, de que toda la historia es una lucha de clases, de opresor contra oprimido, en una batalla que se resolverá solo cuando los oprimidos se percaten de su situación, se alcen en revolución e impongan una dictadura de los oprimidos. La sociedad será totalmente reconstruida y emergerá la sociedad sin clases, libre de conflictos, que asegurará la paz y prosperidad utópicas para todos. Frederick Engels señala: «El primer antagonismo de clases de la historia coincide con el desarrollo del antagonismo entre el hombre y la mujer unidos en matrimonio monógamo, y la primera opresión de una clase por otra, con la del sexo femenino por el masculino». En ese sentido, la feminista Shulamith Firestone afirma la necesidad de destruir la diferencia de clases, más aún la diferencia de sexos. Las diferencias genitales entre los seres humanos ya no importarían culturalmente. La realidad de la naturaleza incomoda, estorba, y por tanto, debe desaparecer. Decía: «Lo natural no es necesariamente un valor humano. La humanidad ha comenzado a sobrepasar a la naturaleza; ya no podemos justificar la continuación de un sistema discriminatorio de clases por sexos sobre la base de sus orígenes en la Naturaleza. De hecho, por la sola razón de pragmatismo empieza a parecer que debemos deshacernos de ella».

¿Qué les parece, estas definiciones, conceptos y enfoques que nos quieren imponer en el Perú?

Sin duda alguna trastoca, principios y valores éticos, tradiciones culturales, religiosas, sociales, familiares; y hasta puede ofender la moral y las buenas costumbres y alterar el orden público.