Indígenas de cuenca del Nanay preocupados por contaminación minera

-De allí se abastece la planta de agua potable de Iquitos

-El gobierno central declaró la incompatibilidad de la zona para explotación minera y seis meses después da su autorización ¿?

Los pobladores de la cuenca del río Nanay, cercanos a Iquitos, incluyendo los de 21 comunidades indígenas (aproximadamente unos 500 mil habitantes) han expresado su preocupación por las acciones del gobierno central que en el año 2011 declaró la incompatibilidad de la zona para cualquier proceso de explotación minera, pero seis meses después dio su autorización.

Representantes de las poblaciones de esa zona, reunidas en un Comité del Agua, y de las comunidades indígenas, acompañaron a la congresista Verónika Mendoza (AP-FA) a una conferencia de prensa para exponer sobre la contaminación del río Nanay y el riesgo de disminuir el abastecimiento de agua a la población.

La congresista informó que actualmente hay una superposición de los estudios de exploración en los lotes 123 y 129 del área de conservación Pucacuro. El lote 123 implica la exploración de 30 pozos, y el lote 129 de 31 lotes por la empresa estadounidense ConocoPhillips, que afectarían importantes áreas naturales.

Mendoza Frisch comentó que en el año 2007 se otorgó una autorización de estudios de exploración minera. Luego de su apelación, el Servicio de Áreas Naturales Protegidas declaró la incompatibilidad para cualquier trabajo en la cuenca, pero en el 2012 retiró la mención.

Ante estas indecisiones de algunas autoridades, la legisladora anunció que en las próximas horas se reunirán con los miembros de la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Ambiente del Congreso, y el próximo viernes 28 con el titular del Parlamento, Víctor Isla, para expresarle la preocupación de los pobladores por la amenaza ambiental en la región.

José Manuyama, vocero del Comité del Agua, explicó que la presencia de ellos en la capital se debe a que, al haberse agotado las conversaciones en Loreto, han decidido poner en conocimiento «un hecho que amenaza sobremanera el futuro de las poblaciones de Nanay y los pueblos que conforman la cuenca».

Informó que la empresa norteamericana ha culminado la etapa de estudios sísmicos en el lote 129 (ubicado en la cabecera del río), que comprende una zona rica en biodiversidad y provee de agua potable a las comunidades colindantes. Los lotes 123 y 129 están ubicados en la cabecera de los ríos Nanay, Pintuyacu y Cahambira, donde se ubica el Área de Conservación Regional.

El río Nanay se encuentra en la selva baja y el agua no proviene de las heladas ni de los cerros, sino depende de sus bosques que produce el 50% de la lluvia y funciona del drenaje natural que encausa el agua hacia su curso. Cualquier actividad extractiva, como la del petróleo, afectará la generación del agua, dijo José Manuyama.

Por estas razones, dijo en otro momento, los pobladores y asociaciones representativas de las comunidades han expresado su oposición a la exploración en la zona. Informó que han realizado tres marchas de protesta, pero no han merecido la atención debida. Por eso han decidido venir a Lima para reunirse con representantes de los ministerios del Ambiente y de Energía y Minas. Tampoco ha habido respuesta de otros congresistas. «El problema es mayor desde enero de este año y esperamos tener una mejor comunicación», sintetizó el dirigente.

Por su parte, Hilter Panduro, representante del pueblo indígena Iquito, dijo que en la comunidad están preocupados y pidieron que se ejecuten los proyectos necesarios para que no se afecte el potencial en flora, fauna y pesca. (DL)