“Estamos en el tiempo de recolectar y sembrar los huevos de taricaya”

– Presidente de organización de pescadores “Los Huacamayos”, Francisco Sampayo

– Dice, es un esfuerzo que “garantiza sostenibilidad del producto y economía en el tiempo”DIANA Francisco Sampayo

Muchos de los que se han organizado en grupos de apoyo, antes, eran ilegales, eran los que ingresaban a la Reserva Nacional Pacaya  Samiria, sin ninguna autorización, arriesgando sus vidas para extraer productos y sin contar con ningún plan de manejo de las especies extraídas. Esta situación ha disminuido bastante y actualmente son 18 grupos que operan en la cuenca Pacaya. En total en la reserva son 70.
“Estamos en el tiempo de recolectar y sembrar los huevos de taricaya”, nos explicaba Francisco Sampayo, presidente de la organización de pescadores “Los Huacamayos”, que ya están trabajando arduamente en esta temporada de la Taricaya. “Ya en el mes de diciembre estaremos vendiendo los `charitos´ (crías de taricaya). El negocio resulta  y es que el 60% de taricayas pueden ser liberadas y el 40% se puede comercializar. Esta forma hace posible la reproducción de la especie”. En cuanto a los huevos también se aplica la regla.
Se conoce que el proceso de pasar a la legalidad ha sido muy duro, hubo mucho conflicto y hay personas que han sido sentenciadas por esta ilegalidad. “Resulta bueno porque garantiza que siga habiendo la especie, que no esté a punto de desaparecer, esto nos perjudicaría también a nosotros”.
Estos grupos de apoyo se han convertido en micro empresas para el beneficio de sus familias, de la comunidad, de la Reserva y para el futuro de todos y todas. “Se ha mejorado la vida, sí, es bastante sacrificado porque estamos lejos de la familia, pero los hijos se benefician y varios estudian en la universidad en Iquitos”.
Ellos también se han convertido en aliados en el cuidado de la Reserva, en vista que es imposible que con 60 guarda parques se cubra más de dos millones de hectáreas, teniendo como áreas de influencia a los distritos de Puinahua, Capelo, Emilio San Martín y Maquía. (D.López)