Estafa forestal

En varias oportunidades los habitantes de comunidades nativas se han quejado del accionar de ciertas empresas forestales, que atentan contra sus intereses mintiéndoles, estafándoles, burlándose de la necesidad de trabajar para generar sus recursos económicos. Hace no mucho fuimos testigos de un caso en la localidad de El Estrecho, río Putumayo.
En estos días se conoció de otro caso, esta vez de la comunidad nativa Nuevo Progreso, río Nucuray, provincia de Alto Amazonas-Yurimaguas, que han denunciado por estafa a la empresa Forestal Amazónica porque indican que les dejó con 300 mil soles de deuda en Osinfor y, obviamente, si no pagan serán embargados.
Pero, cómo son embaucados estos hombres y mujeres del bosque que muy poco conocen de normativas y las artimañas para convencerlos. Cuentan que la empresa se apoderó del ‘permiso forestal´ que manejaba la comunidad mediante una carta poder que hicieron las autoridades nativas para aprovechar la venta de su madera.
Todo parecía un negocio equilibrado donde todos salían ganando. La empresa Forestal Amazónica, según la denuncia pagó 50 soles por cada árbol de distintas especies. Los recursos recaudados de la venta fueron distribuidos entre 26 familias de la comunidad. Todo parecía correcto.
La ingrata y terrible situación legal y económica para la comunidad nativa vino después, cuando fue notificada por una deuda de más de 300 mil soles. Esto, de acuerdo a la denuncia del presidente de la comunidad nativa, Domingo Mucushúa, porque la empresa en referencia no regularizó las guías en la Sunat y Osinfor. Aquí se configuraría la estafa. Además que les que han regalado a 50 soles cada árbol.
O sea, el peor negocio de su vida para estas personas del bosque que poco conocen de los trámites en el tema de la negociación de recursos forestales y básicamente porque se confían, porque creen en la transparencia y responsabilidad social de las empresas en general, porque piensan que así como ellos actúan con honestidad, todos lo hacen.
Lamentable este abuso que se espera que Sunat y Osinfor encuentren una salida legal para no perjudicar más a estos paisanos nuestros, y que las entidades responsables del tema forestal del Estado (en la región), se preocupen por realizar capacitaciones para evitar sigan perjudicando a humildes habitantes del bosque adentro.