Desalojan a invasores de los terrenos de empresario prófugo Mariano Loo

-Hubo varios detenidos. Usurpadores amenazan con volver a entrar.

Fue necesaria la presencia policial y la represión para que más de 100 invasores salgan de los terrenos de Las Ninfas, ubicados frente al gobierno regional. Los efectivos detuvieron a varias personas y arrancaron sus banderas peruanas.

La orden era clara: desalojar y capturar a todo aquel que encuentren en su camino. Por eso, los policías ni bien llegaron en camionetas y colectivos, comenzaron a perseguir a los usurpadores y amenazaron con tirar bombas lacrimógenas y perdigones.

Felizmente, la gente entendió de buena manera y al ver que varios compañeros suyos ya estaban siendo llevados a la comisaría, optaron por retirarse pacíficamente hasta la avenida Quiñónez, donde se quedaron parados dando gritos de protesta.

Sin embargo, en horas de la noche, varias personas denunciaron que fueron víctimas de agresión por parte de la gente allegada al empresario loretano Mariano Loo, quien es el dueño de los terrenos y que actualmente está prófugo de la justicia por no haber pagado un millonario préstamo al Banco Amazónico.

Los usurpadores indicaron que ocuparon las extensas áreas verdes porque no tienen un lugar donde vivir y porque ellos de alguna manera brindarán seguridad, ya que en las noches los delincuentes y drogadictos hacen de las suyas abusando de los transeúntes.

«Somos agregados de diferentes partes de la ciudad y hemos ocupado este lugar porque está abandonado hace muchos años, aparte porque ninguna autoridad se preocupa por brindar seguridad, ya que acá han ocurrido asesinatos y violaciones.

La policía ha venido y nos ha tratado como delincuentes, nos han quitado las banderas del Perú y se han llevado a nuestros amigos. Nosotros no nos moveremos de este lugar pase lo que pase», manifestó una señora.

Hasta el cierre de la edición, se pudo conocer que los invasores seguían deambulando por las inmediaciones de los terrenos esperando el momento oportuno para ingresar nuevamente sin importar la represión policial. (MC).