Continúa el maltrato familiar y escolar

  • La despreocupación por el maltrato a los niños y a los adolescentes es descuidarse del futuro de la patria

Por: Educ. Moisés Rengifo Vásquez
DNI: 05290088 – Telf.: 065-222351

La  despreocupación  al maltrato familiar y escolar a los niños y adolescentes constituye una de las causas de la corrupción y de la delincuencia en el país, por lo  que están interviniendo muchos profesionales, como los psicólogos, psiquiatras, terapeutas, médicos pediatras, médicos geriatras, inclusive las recomendaciones del Ministro de Educación, para indagar las causas de las situaciones socioemocionales críticas de los niños y adolescentes, que por la serie de declaraciones de los referidos profesionales, existen muchas variables, como la depresión, la ansiedad, la angustia, el estrés, la tensión, la violencia, etc. que se pone de manifiesto con la inconducta o comportamiento reprobable de los niños, niñas y adolescentes, debido al  maltrato en los hogares, en las instituciones educativas y en la sociedad. Los casos más comunes y significativos son:
En los hogares, los padres por desconocer las características psicológicas según la edad de sus hijos, les obligan a asumir actitudes y aptitudes como si fueran adultos, imponen a sus hijos que les entiendan tal como ellos disponen, pero estos padres no entienden ni quieren entender a sus hijos y por desobediencia les castigan físicamente. Los disgustos, riñas y peleas entre el padre y la madre origina el nerviosismo y la timidez de los hijos. La embriaguez mayormente del padre ocasiona el temor de los hijos y en vez de comprar los útiles escolares, compra bebidas alcohólicas y los niños van a la escuela   a pasar vergüenza ante el docente y compañeros al no tener sus materiales de trabajo pedagógico. Los padres no tienen los medios ni las informaciones para ayudar a sus hijos en hacer las tareas  escolares y por vergüenza y temor no asisten  a la escuela. El abandono familiar deja a los hijos sin los servicios básicos y aún peor sin el amor de sus padres.
En las instituciones educativas donde se desarrolla la educación básicamente escolarizada en las cuatro paredes del aula con el formalismo de mantener a los alumnos sentaditos el mínimo de cuatro horas cronológicas de lunes a viernes escuchando y copiando el dictado de clases del docente, conforme a su programación basada en el currículo oficial, libros, pizarra y tiza, complementando con la denominada tarea para que los alumnos lo desarrollen en su casa por las tardes o noches y aún los sábados y domingos, mediante la copia de libros, fotocopias de láminas y textos, los temas intrascendentes ni atractivos, pero obligados a cumplir por el temor a ser desaprobados y consecuentemente castigados por sus padres.
Este es el ritmo y la forma de desarrollar el proceso educativo y aún es mayor la exigencia de estudiar para el examen que  en la práctica escolar es sinónimo de memorizar y al no lograrlo en el tiempo previsto, es causante del nerviosismo, del miedo, manera de maltratar a los niños, con el riesgo de llegar a la depresión, al estrés y aún a la violencia.
Pero los niños por naturaleza lúdica fuente de sus vidas, les da asimismo el ánimo natural para jugar. Es entonces que los padres y aún los profesores se quejan diciendo que los niños y niñas no estudian ni hacen la tarea por jugar, por ver la televisión, ir al internet. Frente a esta preocupación los psicólogos, terapeutas, psiquiatras coinciden en recomendar una negociación entre padres e hijos el compromiso de hacer la tarea y después jugar y realizar otras actividades que les distrae. Este columnista recomienda: Aprovechar los juegos y otras actividades que le agrada realizar a los niños como medios de aprendizajes con la estrategia de construcción curricular y su desarrollo en base a sus necesidades e intereses.
El otro caso crítico que afecta a los niños y jóvenes, es la homogenización del proceso educativo en el aula con el promedio de 30 alumnos del mismo grado de estudios, de diferentes características, sexo, intereses, saberes, cultura, áreas curriculares independientes aisladas de la realidad, con la igual exigencia, sin el respeto a las diferencias individuales. Consecuentemente los alumnos al encontrarse con este hecho fuera de razón, al margen de su  realidad y aún contrario a sus propósitos e intereses. Constituye el maltrato psicoemocional que les atormenta, que les desanima, por más motivaciones artificiosas del maestro. Aparentemente  desde lo externo manifiestan su aceptación, pero internamente en su mente y conciencia se refleja lo que ven, oyen, palpan, sienten y les gusta hacer en su medio circundante de su realidad, respondiendo a sus características lúdicas los niños y niñas y a las características psicosomáticas y socioemocionales los adolescentes de ser siempre el admirado o admirada, aceptado por sus ideales y laboriosidad  para ser considerado importante y tener siempre la razón. Ante toda opinión o acto contrario reacciona hasta con violencia. Pero lo acepta con el buen trato y demostraciones de la verdad. Lamentablemente, el tipo de educación con su verticalismo abstracto, promueve  la incomprensión, la tensión, hasta la violencia de los adolescentes.
Para la mayor aclaración presento los testimonios que expresan el maltrato a los niños que son: el niño Marcelino Mori, muy inquieto, juguetón, curioso, preguntón. A los 06 años de edad ingresó a la escuela primaria. La maestra le calificó como malcriado y muy travieso, que le daba a golpes en la cabeza y en su cuerpo obligándole a permanecer sentadito y en silencio en su carpeta y por no cumplir esta imposición hasta le botaba del aula y siempre salía desaprobado, por lo que en                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                  ninguna escuela de Iquitos le aceptaban. A los 09 años de edad intentó suicidarse y oportunamente su mamá doña Fidelia pudo evitarlo y pidió al director del Centro Base de El Estrecho le ayude para que estudie en este lugar. El primer día de su asistencia, el director le presentó ante los profesores y alumnos expresando que es un buen niño, inteligente y estudioso y le consideren en su grupo de trabajo, tanto en la práctica educativa realizando las diversas actividades, en sus juegos y en las aulas laboratorios. Recomendó al profesor de su sección el estímulo correspondiente, atendiendo a sus inquietudes y dificultades. Lo más importante fue el proceso de aprendizaje-haciendo en la vida real (Experiencia de los núcleos escolares campesinos). En la actualidad Marcelino Mori es uno de los mejores abogados en Lima.
El niño  Alfredo Gonzales, procedente de la I.E. 60588 del Bajo Marañón, sus padres le matricularon en el 6º Grado de primaria en una de las mejores Instituciones Educativas de Iquitos. Su primer impacto fue que la maestra después de dictar la clase, les dio como tarea presentar el siguiente día un gráfico referido a Ciencia y Ambiente. Este niño acostumbrado al aprendizaje creativo, hizo todo el esfuerzo en representar el tema mediante su propio dibujo lo mejor pintado posible y se fue al día siguiente muy temprano y alegre a su aula. Al presentar la tarea con su propio dibujo, la maestra le rechazó poniéndole la peor nota, diciéndole que ese dibujo no vale y vuelva a      hacer de nuevo.
Todos los alumnos del aula se burlaron de él. Este niño tembló de temor, no pudo quedarse más y volvió llorando y desesperado a su casa. Una vecina que también tenía a su hijita en el 6º Grado de primaria le dijo a la mamá del niño  que se vaya a sacar la fotocopia del libro y presente de nuevo. Así lo hizo y al día siguiente presentó a la maestra su tarea fotocopiada y le puso la buena nota. ¿Cuál es mejor. El gráfico fotocopiado o el dibujo creativo del niño?
Así está nuestro sistema educativo que privilegia al aula, a la copia, al memorismo, predomina el estudio parcial de carácter cognitivo que lo reafirma el afiche que publica el Ministerio de Educación Central que expresa “Hacia la nota más alta”, aunque sea maltratando a los niños al no respetar sus características, necesidades, intereses y al derecho al buen trato orientado a su formación integral. Que se cumpla en la práctica  el Lema: ¡CAMBIEMOS LA EDUCACIÓN. CAMBIAMOS TODOS!, a partir del derecho universal que tienen los niños de ser tratados como personas de mayor consideración social.