Chiriaco, Cuninico y Morona, destinos ineludibles en la próxima visita de la CIDH al Perú

Ante la próxima visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al Perú, organizaciones indígenas y de derechos humanos han unido esfuerzos a fin de lograr que una delegación de dicho organismo llegue hasta las zonas afectadas por derrames petroleros que han tenido como origen el Oleoducto Norperuano que opera la estatal Petroperú.
El pedido que hacen son para los casos de Cuninico, en el distrito de Urarinas, provincia y región de Loreto (derrame ocurrido en junio de 2014); Chiriaco, en el distrito de Imaza, provincia de Bagua, región Amazonas (derrame registrado en enero de 2016); y Morona, distrito del mismo nombre, provincia de Datem del Marañón, región Loreto (derrame reportado en febrero también de 2016).
Las organizaciones han manifestado su pedido a través de dos cartas enviadas a la propia CIDH (con sede en Washington, EE.UU) que realizará en Lima, del 3 al 7 de julio, su 163 Período Extraordinario de Sesiones.
La primera carta enviada al organismo supranacional tiene como remitentes a la Organización Regional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Norte (ORPIAN-P), el Consejo Permanente de los Pueblos Awajún y Wampis (CPPAW), el Consejo Aguaruna Huambisa (CAH), la Federación de Mujeres Aguarunas del Alto Marañón (FEMAAN), entre otras.
Allí piden que, en la medida de lo posible, para el caso del derrame en Chiriaco, se visite la comunidad awajún de Nazareth, que es «donde se encuentra el mayor contingente de personas afectadas, en especial niños, niñas y mujeres embarazadas», y que tenga lugar un «encuentro con las y los líderes y apus de la comunidad.»
En el caso de la segunda misiva, ésta fue enviada por la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), que agrupa a alrededor de 80 organizaciones de la sociedad civil.
En dicha carta, recuerda que para febrero de este año la CIDH había confirmado su presencia en las citadas zonas de la selva peruana (Chiriaco, Cuninico y Morona), pero que a última hora canceló su visita de forma «arbitraria» lo cual «postergó el reclamo y cumplimiento de derechos fundamentales de los pueblos indígenas» de las zonas afectadas.
La carta recuerda además que a raíz de los derrames hoy se «continúan vulnerando los derechos a la salud y a la vida de niños y niñas» que, incluso, como se informó en su momento, participaron en las labores de limpieza del crudo.
Cabe precisar que si bien las organizaciones indígenas y de sociedad civil cursaron la carta la semana pasada, aún no se tiene información del itinerario que cumplirá la delegación de la CIDH en el caso de su visita a la selva peruana, a la cual se comprometió luego de la cancelación de febrero último. Se tiene conocimiento de que la nueva delegación permanecerá en el país hasta el 11 de julio.
A la luz de los continuos reportes realizados por organizaciones de la sociedad civil, es clamorosa la desatención del Estado en las zonas de los derrames.
En Cuninico, comuneros y comuneras denuncian que consumen pescado contaminado y que no reciben agua apta para el consumo humano; en Chiriaco, decenas de niños y niñas esperan que se les realice exámenes médicos para saber de su estado de salud, luego de que se permitiera su participación en los trabajos de limpieza del crudo. En el caso de Morona, la situación no sería muy diferente. (MIPR)