Canes en las calles

Por donde vaya, sea por el centro de la ciudad, por las calles transversales un tanto alejadas y ni que decir por la zona periférica, los perros callejeros abundan.

 

Ya no hay un control sobre ellos, pues han aumentado en gran número pese a las esterilizaciones practicadas por una institución dedicada a estos menesteres. La presencia de los canes en las calles y mercados de abasto, trae malestar a las personas, que se ven amenazas por estos animales que no se sabe que otras enfermedades, aparte de las que conocemos son portadores, le pueden contagiar al humano.

 

Es más, las calles están sucias con los excrementos de los perros de la calle, por lo que la gente tiene que caminar mirando al suelo para no pisar la cochinada. A esto se suman las deposiciones de los perros caseros, a los que sus dueños sacan a las calles a hacer sus necesidades, lo que es un atropello contra los demás y un atentado contra el medio ambiente y el ornato.

 

Por eso, aplaudimos la labor que la municipalidad de Belén ha encargado a una conocida ONG el tratamiento y esterilización de perros y gatos que pululan por las calles y mercados de ese distrito.

 

No se puede negar que hay una superpoblación de perros y felinos. Todo Iquitos está invadido de estos animales, que ya han provocado accidentes con heridos. Los conductores de motos lineales, por sortear al animal o no apretarlo, son los más propensos a sufrir una caída que puede concluir con fatales consecuencias.

Las representaciones ediles Iquitos y distritos adyacentes, deberían tener en agenda una campaña para erradicar de las calles a los canes callejeros y tener identificados a los que tienen dueño con un distintivo que acredite su buena salud y que no constgituyan un peligro para las personas.