Autoridades municipales desalojaron histórico bar «Luvi» de Yurimaguas

-Con apoyo de la policía y ministerio Público

Fue considerado como un histórico bar, ubicado en plena calle Adolfo Morey de apenas media cuadra con más de 20 años de antigüedad que ayer las autoridades pusieron fin a su existencia física como consecuencia de una resolución municipal que dispone su lanzamiento.

El bar «Luvi» estaba en la actualidad bajo la administración de la señora Telmith Murrieta, quien amplió su pequeño negocio de golosinas en un puesto simple colocando en el quiosco venta de cerveza y comida rápida.

No era la única que trabajaba de esa manera, sino también otras administraciones que han pasado por ese bar desde hace 20 años, sin que ninguna autoridad pueda disponer el retiro de ese negocio, pese a que no tenía autorización municipal.

De algún modo, el bar era del gusto de la gente, de propios y extraños, al punto que algunos lo consideraban un atractivo turístico.

Desde el año pasado, el bar empezó a incomodar a los vecinos, por la presencia de otros negocios similares y proyecciones de negocios de venta de cerveza en esa cuadra. Es cierto que el bar estaba ubicado en media calle, y los vecinos reclamaban a las autoridades que el quiosco debe ser retirado porque se había convertido en un obstáculo para el tránsito de personas, pero más que eso, porque le acusaban a la dueña del negocio de convertir las veredas de las casas y la escalinata del lugar en letrina pública.

Los vecinos han presentado memoriales a las autoridades correspondientes y nadie resolvía nada. Este año viendo la impotencia de la autoridad municipal, los vecinos decidieron cerrar la vía e impedir que la propietaria del bar, abra su negocio hasta que la municipalidad resuelve administrativamente su reubicación.

Tras varios intentos de solucionar el problema vía pacífica mediante el diálogo con la propietaria, las autoridades municipales decidieron cumplir con la ley orgánica de municipalidades, puesto que el negocio no contaba con licencia de funcionamiento y ocupaba una calle.

Lizardo Chujutalli Vargas, gerente de servicios a la comunidad de la municipalidad de Alto Amazonas, informó que mediante una resolución consentida agotada todas las vías y el debido proceso administrativo con arreglo a ley, se procedió a desalojar el quiosco en vista que Telmith Murrieta no quiso salir voluntariamente.

Sin ningún escrúpulo, ante la mirada atenta de muchas personas y de los vecinos que sí pidieron el desalojo, los municipales convirtieron el histórico Bar Luvi en polvo, pues sacaron todo y mediante un inventario de los bienes existentes, comunicaron a su propietaria para la devolución.

Así ha sido el final del bar de muchos parroquianos, autoridades, policías, militares y hasta de periodistas. (GLP)